sábado, 4 de abril de 2015

Gurús del fitness, entrenamiento II


Como algunos sabréis, cuando me da por algo mi entrega es absoluta. -¡Ahí está el loco con su tema!- Buscaba información en cualquier lugar, no soportaba ver algo en la sala de entrenamiento que no controlara o que desconociera, y en poco tiempo me empapé de la cultura fisicoculturista. Técnicas, entrenamientos, suplementación deportiva, sustancias donantes... todo lo que encontraba sobre el tema lo aprendía y a la vez comparaba con otros de mis recientes conocimientos; así formaba una opinión propia que después pondría en práctica con mi cuerpo.

En aquellos entonces mi aspecto rondaba el de una calavera andante, no porque quisiera, sino porqué no era consciente de lo que estaba haciendo. Con un metro setenta y cinco centímetros, y unos cincuenta y cinco kilos de hueso, piel y orejas, puedes llegar a hacerte una idea de como era mi complexión física; la de un maratoniano de Kenia, pero en blanco leche desnatada casi translúcido, por ejemplo. Claro con este cuerpo que había construido a base de una dieta hipocalórica constante y un entreno exhaustivo que jamás saltaba, no tiraba un capullo de peso. -Más débil que una mina Faber-Castell de cero cinco.- Ahora bien, la técnica... impecable. Nadie podía discutirme la ejecución de los distintos ejercicios. Si me preguntaban alguna cosa relacionada con el mundo de las pesas, mis contestaciones eran de manual y con el punto ornamentístico que me caracteriza, dejaba a mi dubitativo compañero en un trance de fascinación. Pero como os podéis imaginar, en un habitáculo saturado de testosterona manda el instinto animal, la bestia que llevamos dentro, así que yo me encontraba en la cola de la cadena alimenticia.

-¿Has visto al chaval ese? -El tío se mata y no crece una mierda. -Entrena bien, pero le falla la dieta. -¿Con ese cuerpo, que pretende? -Mejor que se vaya a comer una hamburguesa. -¡Si ese peso lo levanta mi hermana! -¿¡Cuantas abdominales hace el colgao!? -Un día de estos se parte en dos.- Frases del estilo debía tragar y digerir haciéndome el sueco, cuando seres de músculo congestionado susurraban entre ellos.

No puedes luchar por el liderazgo hasta que no implantas doctrina a tus súbditos. Todos los machotes quieren enseñarte y aunque tengas la técnica más depurada del mundo, encuentran en algún rango del movimiento, algo que no haces correctamente. Todo esto, claro está, a sus ojos de pupilas dilatadas causadas por algún pre-entreno de dudosa legalidad. -Perdona, ¿dejas que te diga algo? -Sí, sí, dime. -Cuando haces esto intenta llevar el hombro hacía delante. Así concentrarás más la parte posterior que es la que interesa. -A vale, gracias, intentaré hacerlo.- Hay veces que el susodicho se queda ahí viendo como ejecutas lo que él piensa que es correcto. Como si fuera un examen final de carrera, debes realizarlo como el profesor dice sino la recuperación lastrará tus días, y lo más jodido es que todos los minutos que pases en el gimnasio serán septiembre. Estos Gurús, de poca monta poseedores de la única verdad, están en todos los gimnasios del mundo al acecho de cualquier chavalín perdido, o no. Si hay algún novato realizando un ejercicio realmente mal, lo que debería hacerse, solo si es muy critica la situación y se ve que peligra su integridad física, es avisar al monitor de la sala para que él juzgue si es necesario decirle algo. ¿Para eso está, no? No hay que ir de falsa alma caritativa en busca de la saturación del ego personal.

Seguía sin crecer. Sí, me estaba definiendo de forma extrema, ya no estaban los huesos pegados a la piel, ahora se distinguían unos tímidos músculos recién florecidos. También tenía los abdominales bien marcados, incluso me subía por encima de ellos una vena que nacía de mi zona pélvica. Estaba bastante contento, pero no veía grandes resultados si lo comparábamos al esfuerzo entregado. Entonces indagué más sobre la dieta que supuestamente hace la gente más "tocha". Al poco descubrí que aquella alimentación perfecta que seguía al pie de la letra, jamás me haría segregar la testosterona suficiente para conseguir el cuerpo deseado. Necesitaba un aumento de calorías notable. -A partir de ahora más carne roja, plátanos y atún a cascoporro, tortillas cada dos por tres, arroz integral y tortillas de maíz para saturar los hidratos y mantequilla de cacahuete, que no pueden faltar las grasas saturadas.- Comer, comer y comer. Raciones descomunales controladas bajo báscula de precisión; las cantidades de hidratos, grasa y proteínas debían ser precisas. Los horarios debían ser exactos a nivel obsesivo. Si un día no podía comer a las diez, que es cuando me tocaba el bocata de pan integral de molde, cincuenta gramos de mantequilla de cacahuete y cien de pechuga en fiambre de pavo, entraba en un nivel de estrés exagerado que se veía incrementado a su vez, al pensar que ese  mismo estrés me estaba haciendo segregar cortisol hambriento de fibras musculares.

-Bueno ya comemos a razón del desgaste físico generado, solo falta esperar... -¿¡Pero bueno, que hace ese tío!? ¿Dónde va con un tarro enorme en la mochila? ¿Qué son esos polvos que mezcla con agua? -Los batidacos.- El mundo de la suplementación deportiva es un punto y aparte. Un negocio el cual participan todos los culturistas actuales y pasados. Los que están en activo, compitiendo, fichan y publicitan grandes marcas. Las magnas leyendas, ya retiradas de las tarimas, crean su propia línea de productos. La publicidad de estos "polvos mágicos" es del todo engañosa a la vez que intencionada. Ponen atletas de ciento veinte kilos al lado de un pote de proteínas en polvo y claro, cualquiera que desconozca este mundillo piensa que al tomar ese, elixir para algunos y veneno para otros, pasarás de ser el Dr. Jekyll a convertirte inmediatamente en Mr. Hyde. Por orden alfabético: (Puedes saltártelo hasta el fin del párrafo si lo deseas, a no ser que tengas curiosidad) -Arginina aumenta los niveles de óxido nítrico; beta-alanina genera contracciones musculares mayores; capsicina aumenta el metabolismo e incrementa la pérdida de grasa; glutamina ayuda a la hipertrofia y favorece la recuperación de la descomposición muscular; histidina combinada con la beta-alanina potencia la fuerza, la resistencia y el tamaño; leucina aminoácido que inicia la síntesis proteica; magnesio que entre otras cosas reduce los niveles de cortisol y aumenta la testosterona; norvalina derivado de la valina que puede llegar a incrementar los niveles de óxido nítrico hasta en un cincuenta por ciento; potasio junto con el magnesio reinan sobre todos los minerales, hidrata y recluta agua intramuscularmente durante el tiempo de ejercicio; proteína de suero la más efectiva para aumentar la síntesis proteica; selenio mantiene el metabolismo acelerado a la vez que juega un papel fundamental en la función inmunológica; sinefrina también es un acelerador del metabolismo pero este sin incrementar la presión arterial ni las pulsaciones cardíacas; taurina mejora el rendimiento tráctil del músculo; tirosina mejora la concentración mental, el rendimiento e incluso ayuda a la perdida de grasa; vitaminas desde la B hasta la K favorecen todo tipo de funciones orgánicas; vitargo carbohidratos complejos que se digieren dos veces más rápidos que el propio azúcar; zma una mezcla de zinc, aspartato de magnesio y vitamina B6, ayuda al aumento de las hormonas anabólicas entre otras funciones.-

Si no lo recitas de carrerilla, como en el colegio las preposiciones y las conjunciones, no eres nadie. Seguro que me he dejado más de, qué sé yo, ¿diez? Hay verdaderos adictos a este tipo de suplementos, y no son precisamente baratos. Toman batidos, cápsulas, pastillas y líquidos viscosos a todas horas. Dan más importancia a la suplementación que a la misma comida. -¿Que tontería, no? Su-ple-men-ta-ción, repite conmigo.- Ojo, no confundir estos productos, del todo legales y que pasan unos controles minuciosos, con las sustancias dopantes.

-¡Ahora sí! Te presento: aquí está el bíceps, detrás tenemos al tríceps y delante, naciendo de la muñeca el antebrazo; esto de aquí es el hombro y el trapecio, bajas cuello abajo y observaras el pectoral; si te fijas justo detrás podrás ver los dorsales y sí, más abajo vuelvo a tener culo, seguido de unos largos femorales que acaban la pierna con un par de gemelos; giramos ciento ochenta grados, pasando por los aductores o si lo prefieres por los abductores, y por último encima de la rodilla, podemos contemplar los cuadriceps.- La felicidad... después de un largo recorrido los resultados son excelentes a mi entender. El esfuerzo y la disciplina han logrado el éxito. Pero cuando crees que estás en la cima, la niebla escampa y divisas que la montaña sigue sin ser coronada, incluso hay cientos delante tuyo. Es cuando aparece aquel tipo que va al gimnasio unos cuatro meses antes de ir a la playa; los "pre-playa" les llaman. Tu llevas religiosamente acudiendo a ese templo de sudor y lagrimas más de tres años, pero ese tio en cuatro míseros meses te dobla en volumen, destapa infinitas venas más que tú y tira con unas mancuernas que ni sabías que existían. -Es la genética. -¿La genética? y una mierda.- Después de varios años he comprendido que no merece la pena hacer mala sangre por ver a chavales jovencísimos con un tono muscular sublime, y aunque todavía fantaseo con que se estrangule con la barra de press banca aquel que levante más que yo, el esfuerzo personal, ganado a pulso sin ayudas de ningún tipo y solo con mi ansia de superación, me pone por encima de cualquier mastodonte ciclado en forma de equis. -Estoy en la cima de mi montaña.- Reitero.

Continúa el 11/04/2015 - Gurús del fitness, descanso

6 comentarios:

  1. Ainssss Gerard, me sigue dando mucha risa la forma en que lo cuentas!! jajajajaa. Sabes que de estos posts saldría un monólogo chulísimo para el Club de la Comedia?? Yo no digo nada, pero ahí dejo la idea ;)

    Respecto al entreno yo creo que como en todas las cosas, en el término medio está la virtud. Cuidado y salud sí; obsesión no. Tú te sientes bien en tu cuerpo y tu trabajo te ha costado, así que a disfrutarlo!!

    Un abrazo y gracias por las risas :)

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    1. Gracias Julia por tus palabras y elogios. Quién sabe quizás un día cambie la llave inglesa por un teclado al lado de un café. Jejeje... no, en serio, es todo un honor tu presencia incondicional.

      Sentirse bien con uno mismo es lo primordial, en cualquier caso. Pero en este mundillo cuando alcanzas un objetivo, aparece otro. Es la causa que te hace seguir entrenando. Una rueda que jamás acaba de girar.

      Recibe un fuerte abrazo.

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  2. ijijijiji me arrancó risa,me encanta la forma como lo relatas,atrae atrae!! tendré que venir más a menudo:P...eso de los "pre-playa" me dejo pensando mucho....
    sé que recordaré tu relato cuando vea algunos en mi gym!

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    1. Pásate cuando quieras. Me alegra que te haya gustado y si consigo arrancar una sonrisa acompañada de un aire feliz, me doy por satisfecho.

      Sí, los pre-playa, menudos son.

      ¡Saludos Ady!

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  3. ¡Qué cultivado! Pero, ¿qué pasa con la caseína? De los supuestos diez que faltan, ahí te dejo uno.

    Y así sin más revelaré la clave de tu éxito, la mantequilla de cacahuete, que gran descubrimiento!

    A por el final de tu primera cuatrilogía.

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    1. ¡ C A S E I N A ! Joder, uno de los más famosillos, va y se me pasa.

      -Con la C proteína de digestión lenta que libera aminoácidos secuencialmente, ideal para momentos de ayuno temporal, como por ejemplo el nocturno.-

      Ya te vale... y la gente a comprar maní como posesos. Los Dr. Jekyll ahora sabrán transformarse en Mr. Hyde y no cabremos en el gimnasio.

      Falta poco.

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